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Este elegante Reloj de Pared Escultórico fue elaborado a base de un viejo tablero de abeto con la técnica Shou-Sugi-Ban.
Es una técnica japonesa muy antigua que consiste en quemar la superficie de la madera, luego lavarla, cepillarla y terminarla con aceite.
La madera utilizada tradicionalmente es el cedro japonés, pero se pueden lograr buenos resultados con muchos otros tipos de madera, incluidos el abeto, el alerce y el ciprés.
La madera tratada de esta manera se vuelve más dura y más resistente al clima y al fuego.
También adquiere un acabado muy bonito y característico, que es lo que más me interesó.
#1: El Diseño de nuestro Reloj de Pared Escultórico
Todo comenzó desde aquí.
- Hice este boceto usando marcadores y tinta en un cuaderno de bocetos.
- Todavía no era un reloj a esa hora …
#2: Elegir la madera correcta
- Busqué la madera para usar en un cobertizo donde guardo tablones y vigas muy viejos.
- Elegí un viejo tablero de abeto para trabajar fácilmente y por el buen contraste entre el color de la madera clara y el acabado en negro.
- Al no poder sacarlo del cobertizo, decidí cortar la pieza que necesitaba directamente donde estaba con una sierra circular.
#3: Carbonizar la madera
- Puse el tablero sobre dos caballetes protegidos por una lámina de metal. Así que empecé a quemarlo con una antorcha de propano.
- La carbonización debe ser bastante profunda y no solo una coloración superficial, de lo contrario, cuando la cepillas, se desprende.
- La pieza después de la carbonización puede permanecer caliente durante mucho tiempo, por lo que debe asegurarse de enfriarla con agua antes de manipularla.
#4: Lavado y cepillado
- Para lavar la pieza, utilicé un cepillo de nailon de cerdas rígidas y no un cepillo de metal que, sin duda, habría dejado marcas en la madera. Es básicamente eliminar la parte carbonizada que se ha vuelto friable.
- A pesar de esta operación, la madera continuará manchándose de negro hasta que se engrase y el aceite se haya secado.
#5: Comenzando el tallado
- Después del lavado, esperé un par de días a que la madera se secara de nuevo y luego fui a las operaciones de tallado.
- Marqué la posición de los agujeros y los canales con una brújula y un cuadrado.
- Decidí la posición de estos agujeros a ojo, usando la manecilla más larga del reloj para asegurarme de que había suficiente espacio.
- También usé un reflector de luz para ayudarme a marcar curvas (lo primero que encontré del tamaño correcto).
- Luego comencé el tallado trabajando cuidadosamente los contornos del diseño con una gubia.
- Era importante asegurarse de que ni un solo corte terminara fuera de las líneas marcadas.
#6: Los Agujeros
- Luego hice los agujeros con una broca de copa, pero sin quitar el núcleo en ese momento.
- De esta manera, fue posible cavar el hueco forzando el corte con mayor fuerza, sin el riesgo de arruinar la pieza.
- Hice esta talla como si estuviera haciendo un tazón pequeño.
- Después de terminar esa parte, completé el agujero y lo rellené con precisión con una buena escofina.
#7: Suavizar
- Para suavizar el tallado, utilicé un Dremel con una pequeña muela abrasiva, lo que ha acelerado enormemente esta operación.
- Luego terminé de lijarlo con papel de lija de grano 120, 180 y 240 hasta que quedara perfectamente liso.
#8: Tallado del Mecanismo del Reloj
- Entonces me di cuenta del agujero y el receso para el mecanismo del reloj.
- Primero marqué el tamaño del receso con un lápiz, utilizando el mecanismo como referencia.
- Para hacer el recreo utilicé una broca Forstner montada en mi taladro inalámbrico y un cincel para ayudarme a cuadrar los orificios.
- Puse atención para asegurarme de que el hueco fuera de la profundidad adecuada para que el pasador del reloj sobresaliera tanto como fuera necesario para sujetar la tuerca.
#9: Acabado
- Una vez terminado el trabajo, llegó el momento de terminar la madera con aceite.
- Primero engrasé el interior de la talla, para asegurarme de no ensuciarla con hollín.
- Luego engrasé todo el resto del tablero con aceite de linaza hervido generoso.
- Al final, quité el exceso con un lienzo.
#10: Montaje del reloj
- Una vez que el aceite se hubo secado, llegó el momento de ensamblar los accesorios colgantes y el mecanismo del reloj y colgar el reloj en la pared.
- Atornillé algunos accesorios de latón al tablero. Son algo que tuve en mi taller y no sé exactamente de dónde vienen.
- Luego coloqué en su lugar el mecanismo del reloj.
- Después de colgar el reloj en la pared pude montar las manos sin arriesgarme a arruinarlas.
#11: ¡Vista final!
El reloj de pared escultórico ya está completo. Aquí hay algunas fotos del producto final.
Gracias por revisar este artículo. No tiene simplemente una función didáctica, sino que traté de darle un valor «artístico», por lo que debería verlo solo por el placer de hacerlo.
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